Aquel día, invitados por nuestra amiga Adela Siles, pudimos participar poniendo música a un fragmento de su pregón. Fue una noche de nervios y, sobretodo, de mucha ilusión, puesto que era la primera actuación que realizábamos.
La marcha que interpretamos fue todo un clásico en la música cofrade: Amor, Corneta y Costal. Tuvimos la suerte de contar con nuestros amigos del grupo flamenco Kalandraque. La sintonía fue perfecta.
Guardamos un buen recuerdo de aquella fría noche de cuaresma en la que, con sólo una docena de músicos, presentamos ante el público allí presente lo que más adelante sería la Banda de Cornetas y Tambores de la Asociación Cultural y Musical Passio Christi.
Os dejamos algunas fotos del acto.